Virtú juego de mesa

Virtú, reseña by Gixmo

Virtú, si con acento en la u, es la forma italiana de decir virtud, que Maquiavelo teorizó en ese pedazo de libro que escribió que es El Príncipe, y que recomiendo leer con los comentarios de Napoleón).

Muy básicamente dice que hay 2 formas de luchar, con la Ley y con la fuerza. La primera es la ideal, pero como falla muchas veces, hay que recurrir a la segunda.

Virtú, cuando falla la ley

Virtú juego de mesa

Ficha

Virtú

  • Diseño Pascal Ribrault
  • Ilustración R. Gewska, Svetlana Pikul, Alena Stepanova, Fabrice Weiss
  • Arrakis Games
  • 2-5 Jugadores
  • 60-150 minutos
  • +14 años

Introducción

Virtú es un juego, con bastante conflicto, que nos pone en la Italia del siglo XV, cuando las ciudades Estado eran las que hacían y deshacían en la zona. Nos meteremos en el papel de Milán, Florencia, Nápoles, Roma o Venecia para ser los que mandemos más al final de la partida.

Así que, como es de rigor, hablemos de los componentes.

Mathom juego de mesa

Estética y componentes

En una caja de tamaño Catan, de la que me aprenderé algún día las medidas, nos encontramos con mucho material, y todo de buena calidad. Un tablero con 2 caras representando Italia, tableritos para cada jugador, muchas cartas con dibujitos de gente de la época, gráficamente cumple, sin deslumbrar, pero ya se sabe que yo voy más a la practicidad.

Muchas losetas con las diferentes ciudades y alguna Catedral y otra cosa que hay disponibles, y muchas fichas de maderita, algunas con forma de máscara veneciana que representan a los espías y algunas con figura de soldado que usaremos para conquistar.

Así que a este punto vamos bien.

Virtú juego de mesa

¿De qué va?

A pesar de tener tanto componente, la preparación de la partida no es para nada tediosa ni larga.

No vamos a entrar en una explicación de reglas, que esto es una reseña, así que vamos a intentar explicarlo muy brevemente.

Una partida de Virtú nos pone en el papel de una de esas ciudades, representadas por las familias importantes de la época, y vamos a intentar invertir en mecenazgos, anexionar ciudades de forma “amistosa”, conquistar ciudades que no vienen de forma amistosa y mover nuestros espías por todo el tablero para ayudarnos y molestar a los rivales.

La partida va a terminar cuando un jugador controle 10 ciudades en el tablero, alguien llegue al final del track de mecenazgo, o ya no quede ninguna ciudad neutral en el tablero, en ese momento se hace un recuento de puntos (por ciudades controladas, como estes en el patronazgo, influencia religiosa, cartas y losetas que den puntos, prestigio militar, alianzas e indulgencias).

Aunque parezca una ensalada de puntos, realmente todos van enfocados en la misma línea, en controlar ciudades y ser un buen mecenas de la época.

Cada ronda de Virtú se va a dividir en 2 fases, la de primavera, que es donde se hacen todas las cosas, y la de invierno, que es una especie de mantenimiento, pero en la que se van a tomar acciones.

En la fase de primavera cada jugador va a realizar una acción, una sola, así que me atrevo a afirmar que es un juego bastante dinámico, al hacer solo una acción, esta se hace rápido.

Antes de comentar lo que más me gusta de esta parte, las acciones disponibles que tenemos son gobernar (para recuperar losetas de recursos usadas), hacer de patrocinador para subir en el mecenazgo, comerciar para conseguir dinero, anexionar para conseguir ciudades por la vía diplomática, entrar en guerra para hacerlo de forma menos diplomática y usar nuestros espías.

En esta fase es donde ocurre la magia, y donde hay varias cosas que me gustan, como es el uso de los recursos y la selección de acciones.

Virtú juego de mesa

Empecemos con la selección de acciones, cada jugador tendrá su propio tablero que representa su palacio, en él tenemos 5 espacios de acciones (que podrán estar vacíos o tener alguna carta modificando lo que sucede).

La forma de elegir esto es una especie de rondel, tendremos una ficha que se irá moviendo de 1 a 2 espacios gratis, con la opción de pagar para mover algo más o usar algún recurso que nos lo permita. Esta es una mecánica que a mi me gusta, para empezar, no vas a poder, en principio, hacer la acción que quieres, así que tienes que ir planificando cómo ir gestionando tus acciones. Es más, al poder colocar cartas, vas a poder gestionar hasta qué acciones vas a tener disponibles en cada lugar. Aspecto que me gusta aún más.

La otra parte que me gusta de esta fase es el uso de los recursos. Cada acción te va a requerir un tipo de recurso (tampoco hay muchos, no os asustéis), si el recurso lo tienes en la propia acción que estás haciendo, lo vas a tener disponible siempre para esa misma acción, pero esto no va a ser siempre suficiente para hacer eso que tú quieres, así que tienes que conseguir más recursos. Estos van a venir de otras cartas que tengas como cortesanos (se colocan a un lado del tablero) y de losetas que hayas ido consiguiendo, ya sean de ciudades o de otras cosas por el medio. El detalle que me gusta de esto es que cuando usas los recursos de alguna de estas fuentes, esta se agota, así que vas a tener que buscar la forma de volver a tenerlos disponibles.

Para los cortesanos es moviendo tu ficha de selección de acción por esa zona, con lo que más gestión de las acciones que quieres aun, y para las losetas con la acción de gobierno, así que ya tienes que pensar en hacer una acción de gobierno para poder tener más recursos para luego poder hacer la acción que realmente quieres.

Al margen de todo esto, si no ha quedado claro, es un juego con una interacción altísima, tanto directa como indirecta. Tenemos esa interacción indirecta en el conseguir determinadas cartas que nos interesan y que nos darán muy buenos beneficios, o ser el primero en conseguir ciertas ciudades, por ejemplo.

Virtú juego de mesa

Pero también tenemos mucha interacción directa, puesto que vamos a poder conquistar las ciudades de los rivales, destruir sus ejércitos o molestar en exceso con nuestros espías. No voy a entrar mucho en el combate, pero sí que quiero dejar claro que no es tedioso en absoluto (se resuelve rápido) y no es azaroso, ya que no hay dados, vale, se pueden meter unas cartas para apoyar el ataque o la defensa, pero son cartas que tienes desplegadas en la mesa.

La parte de los espías me gusta mucho y le da un toque muy divertido al juego, y fijo que nos recuerda a otros juegos. Tenemos unas fichas de espía, y podremos conseguir más en la partida, que van a ayudarnos y molestar muy mucho a los rivales, si estos andan de paseo por el mapa o en las alianzas, nos pondrá más fácil el conseguir nuestro ataque o nuestra alianza, si están en zonas donde está el rival, se lo pondrá más difícil para conseguir sus objetivos. Pero no solo eso, además los espías pueden entorpecer las acciones de los demás, puesto que los puedes introducir en los palacios de los demás, bloqueando las acciones que quieren hacer, obligándoles a elegir otra acción, o forzándoles a quitar tu espía de esa acción.

Con esto tenemos vista la fase de primavera, una vez hecho esto, pasamos a la fase de invierno que es una especie de mantenimiento. Pero justo al final de primavera, antes de entrar en invierno se resuelven los asedios que haya en juego (me repito en que estas resoluciones son muy sencillas y rápidas).

En invierno tendremos que pagar los salarios a nuestras tropas, podremos reorganizar nuestro salario (esta parte puede resultar un pelín compleja de resolver como he visto, amén de que es un pequeño puzle a resolver si quieres hacer ciertos cambios), es cuando se podrán comprar cartas y losetas, comprar nuevas tropas y formar alianzas.

Lo dicho, un mantenimiento, pero con toma de decisiones.

Una vez que se dispara el final del juego, que sucede al final de la primavera, se resuelve el invierno que queda y se hace un pequeño recuento de puntos, que, como decíamos, no llega a ser una ensalada de puntos, ya que todos van enfocados en un par de direcciones.

Virtú juego de mesa

Conclusiones

Algún comentario respecto al juego. Las reglas no son realmente complicadas, pero si es recomendable que quien las explique lo tenga bastante claro, el reglamento está bastante bien estructurado a este respecto, con ejemplos que ayudan mucho a tal efecto.

La duración del juego no llega a ser larga, según la caja es de 30 minutos por jugador, teniendo en cuenta que llega hasta 5 jugadores es bastante acertada, aunque me atrevería a decir que es en el espectro amplio, normalmente te va a durar menos. De todas formas, como es bastante dinámico, no vas a tener casi entreturno y vas a estar metido en lo que está pasando en todo momento, ya sea para hacer tu acción, reaccionar a lo que hace otro o ver lo que está pasando en el tablero.

Con esa sencillez de reglas, bueno, reglas medias, pero no quedaba tan bien a la hora de escribirlo, vas a tener un buen rato, así que busquémosle las cosquillas al juego.

Por ejemplo, la parte de reorganizar el palacio es un poco puzle y puede ser difícil de entender, al menos de aprovechar y conseguir lo que tú quieres.

Si eres un apersona que no le gusta que te frustren tus planes, mejor no juegues a Virtú, ya que te pueden llegar a bloquear, si has tomado alguna que otra mala decisión, puedes quedarte casi fuera de la partida y tener que estar unos turnos a rebufo para recuperarte.

Añadido a esto, puede que, si juegas con auténticos desalmados, vayan varios jugadores a por uno, dejándole hundido durante la partida. Si con esto nos entra el miedo de ir a por el líder, no lo veo problemático, ya que, no solo hay algunos puntos que no se sabe muy bien como están en cada momento, sino que si alguien se ha expandido mucho su posición será vulnerable, pero por expandirse, no porque le den caña. Además, siempre tienes la opción de ir a por el mecenazgo, si aun así te están destrozando entre varios, el problema es de los jugadores, no del juego, por mucho que el juego te de esa opción.

Qué más podemos decir de Virtú, salvo que la rejugabilidad está dada por hecho con todas estas situaciones. La escalabilidad no es mala, aunque, siendo totalmente sincero, no lo he jugado a 2 jugadores, ni tengo intención de hacerlo. Para 2 jugadores tenemos un libreto de reglas aparte, pero no me compre el juego para jugarlo a 2. Como realmente brilla es a 4 o a 5 jugadores, usando un lado u otro del mapa.

Valoración Subjetiva

Sello Web Excelente
Virtú juego de mesa
VIRTÚ
CONCLUSIÓN FINAL
A modo de resumen, Virtú es un juego con sabor renacentista italiano, no solo en los nombres, sino en la ejecución de las acciones y lo que pasa en el tablero. Con un mecanismo muy divertido de turno hace que la duración de la partida sea muy dinámica y divertida. Aunque si tenemos que decir que ocupa mucha mesa.
MECÁNICAS
95
ESCALABILIDAD
75
ESTÉTICA Y COMPONENTES
80
REJUGABILIDAD
90
Nota de lectores1 Vota
70
PROS
Mecánicas muy bien pensadas para su desarrollo
Turnos rápidos y dinámicos
Mucha interacción y diversión
CONTRAS
Algunas acciones se pueden atravesar a algunos jugadores
Necesita bastante espacio en la mesa
No apto para gente que no tolere la interacción
85
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