Es fácil pensar que en juegos de mesa ya está todo inventado, y además no nos equivocamos demasiado.
También podemos decir cuando llevamos muchos años en esto que todo lo nuevo son refritos de mecánicas ya utilizadas antes, esto no es tan cierto como lo antes pero la última novedad que yo recuerde que revolucionó los juegos de mesa fue cuando allá por el año 2008 mi adorado Dominion trajo el Deckbuilding (construcción de mazos) a nuestras vidas, y cada vez es más difícil sorprendernos.
Tactical Commander, una sorpresa
En los wargames pasa más o menos lo mismo y con un agravante:
- A los aficionados a los juegos de guerra y a la historia nos encantan los “sistemas”.
- Los juegos que comparten la base de las reglas y que con algunos detalles añadidos representan batallas y hasta épocas diferentes
- Nos encanta que sin necesidad de aprender un nuevo juego podamos disfrutar recreando múltiples guerras, así que no es la innovación lo que más se premia.
Y es por eso que cuando juego a algo que me sorprende, que me parece diferente me alegro mucho. Y si además de diferente es bueno pues muchísimo mejor, y este es el caso del juego que nos ocupa.
Trafalgar Editions es una pequeña (sin ánimo de ofender a nadie) editorial española de wargames y libros de historia militar que está centrada en la producción propia y con autores “de la casa” y siempre con mecánicas y estética muy originales.
Juegos como Noruega 1940 y Austerlitz 1805 aportaron frescura a este nicho y además creada en nuestro país y en nuestro idioma, los que no los conozcáis, investigad que por lo menos vais a encontrar unos títulos muy interesantes.
Empezaba el año 2022 y en la BellotaCon V (la primera en IFEBA, la de las mascarillas) me acerqué a la mesa de Trafalgar Editions y Crisanto, uno de los capos de la editorial, me enseñó un juego que había probado el año anterior de forma virtual y que seguían testeando aunque ya estaba casi terminado: Tactical Commander.
Ambientado en el frente del este durante la Segunda Guerra Mundial, el juego recrea enfrentamientos tácticos entre tropas rusas y alemanas, podemos jugar escenarios históricos o ficticios.
Me gustan mucho los juegos de cartas pero los wargames que había probado con cartas no terminaban de convencerme, hasta que jugué este. Este artículo no es una reseña y no voy a describir las reglas, sólo voy a contar un poco cómo funciona. Tenemos un mazo de cartas para cada jugador compuesto por las unidades militares disponibles, y un mazo común de cartas de acción que nos permitirá actuar con esas unidades.
Además disponemos de un tablero táctico en el que evolucionan nuestras unidades, las bajamos a la mesa pagando una serie de recursos con cartas de nuestra mano y actuamos con ellas gastando puntos de comando.
El tablero tiene una trama hexagonal neutra sobre la que construiremos el escenario con los múltiples marcadores de terreno que vienen con el juego, las fichas representando la infantería y vehículos también son genéricas porque en nuestro tablero personal tendremos las cartas a las que esas fichas representan con todas las características que necesitamos para jugar.
No voy a extenderme más, en cuanto caiga en mis manos y pueda echar varias partidas tendréis una reseña más extensa.
Y espero finalmente poder disfrutar de este juego, que todos podamos disfrutarlo, porque todavía quedan 12 días para terminar la campaña de Kickstarter y confiamos en que se financie. Si las plataformas de micromecenazgo tienen un sentido, es este, apoyar a autores y pequeñas empresas para que puedan sacar adelante proyectos que de otra forma no verían la luz.
Tactical Commander no es un juego sencillo, pero con un poco de esfuerzo cualquiera puede jugarlo, desde el wargamer experimentado hasta el que acaba de llegar a la afición. Hay muchos juegos tácticos, y hay muchos juegos de cartas, pero como este yo no conozco ninguno, y al precio que está es una pena que tú te lo pierdas si crees que podría interesarte.
Desde aquí, a título personal, pido vuestro apoyo para este juego, por un lado tengo razones egoístas, quiero tener el juego en mi colección y sacarle todo el jugo que pueda, pero por otro lado creo que Trafalgar Editions se lo merece, es una gozada tener en España editoriales como esta, que se salen de lo convencional y que arriesgan para que podamos disfrutar de sus juegos.
Siempre aconsejo a todo el mundo que pruebe un juego antes de comprarlo para formarse su propia opinión en vez de aceptar sin más lo que decimos los que escribimos sobre esto, pero para probar este primero todos necesitamos que se financie. Os dejo el enlace a la campaña para que lo podáis curiosear.