Command & Colors: Edad Antigua nos traslada a algunas de las batallas icónicas de antes de la edad de Cristo. Un título que nos trae Devir en castellano.
Command & Colors: Edad Antigua, la lucha entre Roma y Cartago
Ficha
Command & Colors: Edad Antigua
- Editorial: Devir, GMT Games
- Diseñador: Richard Borg
- Dirección artística: Rodger B. MacGowan
- Mapa y adhesivos: Rodger B. MacGowan, Mike Lemick, Mark Simonitch
- Adaptación edición española: Antonio Catalán
- 2 jugadores
- 60 minutos
¿De qué va?
Command & Colors: Edad Antigua es un juego táctico que recrea 15 batallas entre Roma y Cartago entre el 406 a.c. (Akragas) y el 202 a.c. (Zama). Llevaremos a distintos tipos de tropa al combate, infantería ligera, arqueros, infantería pesada, caballería, elefantes dirigidos por los líderes de la época. Tomaremos el sitio de Amilcar, Asdrubal o Anibal por el lado cartaginés o de Flaminio, Regulo o Publio Cornelio Escipión para cambiar la historia o repetirla.
Sistema de juego
No se puede afrontar una reseña de este juego sin hablar del sistema. La primera vez que vemos el sistema Comand & Colors de Richard Borg es en el juego Battle Cry de 1999, en 2004 llega Memoir 44 y en 2006 el que ya toma el nombre Command & Colors: Edad Antigua. En la Boardgame Geek hay 87 entradas de este sistema entre juegos y expansiones, 12 son juegos principales, 5 son Command & Colors de distintas épocas y tienen 15 expansiones entre los 5. Son cifras aburridas pero las quería citar para que os deis cuenta de lo grande que es el juego del que vamos a hablar y en el que se ha metido Devir. No es el primero del sistema que está traducido al español, pero puede que sea el más representativo, con permiso del Memoir 44.
Una vez dicho esto, voy a escribir esta reseña basándome en un sólo juego, el que nos ocupa, aunque seguro que habrá referencias al resto de los que componen el sistema.
¿Cómo se juega?
El sistema es simple pero efectivo. Primero se colocan ambos ejércitos según nos indica el escenario elegido y luego ambos jugadores se alternan jugando hasta que finaliza la partida. En su turno cada jugador juega una carta de mando que le permite activar a una o varias unidades en diferentes secciones del tablero (Flanco izquierdo, Centro o Flanco derecho) con las que podremos mover, atacar a distancia o combatir cuerpo a cuerpo.
Cada unidad está representada en el tablero por un número de bloques de madera con sus correspondientes pegatinas que representan los impactos que pueden resistir antes de ser destruídas, la infantería se compone de 4 bloques, la caballería de 3 y los carros de 2, por ejemplo. Diversos tipos de terreno también se pueden añadir al tablero según nos indique el escenario que tendrán influencia en el combate y en el movimiento. La secuencia de juego es muy sencilla:
- Jugar carta, la carta nos indicará qué unidades podemos activar y si tendremos alguna habilidad especial este turno.
- Mover, las unidades se mueven según sus características.
- Combatir, cada unidad lanza los dados que indiquen sus características y anota los impactos correspondientes.
- Reponer carta, robamos una carta de forma que se mantenga el tamaño de nuestra mano de cartas que será del tamaño que indique el escenario.
Las condiciones de victoria de cada escenario son conseguir un número de insignias del otro bando que se obtienen de formas diferentes pero casi siempre será eliminando unidades enemigas.
No voy a entrar en más detalles aquí, pero todo está muy bien explicado en el reglamento y en las hojas de ayuda que son imprescindibles para tener siempre a mano las capacidades de las distintas unidades.
Componentes y diseño
La calidad de esta edición es muy buena, los materiales son funcionales y facilitan la jugabilidad. Ya he mencionado lo buenas que son las hojas de ayuda y el reglamento, las cartas tienen la calidad a la que nos tiene acostumbrados GMT y las ediciones de Devir se sus juegos, los hexágonos de terreno son de cartulina no demasiado gruesa para no entorpecer el tablero y puede que sea lo que primero se deteriore con el uso. El diseño gráfico es austero y práctico, al estilo de Rodger McGowan y Mark Simonitch, en cuanto a si es más o menos bonito cada uno puede tener su opinión, lo que a mi me interesa es que es perfectamente jugable. Los bloques de madera de distintos tamaños representan muy bien las unidades y son estables en el tablero.
Las pegatinas… es tedioso tener que pegarlas, imagino que será un tema de producción y de costes pero ¿Por qué no vienen ya pegadas en los bloques? Nos ahorraríamos problemas, no todo el mundo tiene el pulso correcto para pegarlas rectas en su sitio. Y tengo que hacer un reproche, no sé si calificarlo como errata, pero si sigues las indicaciones de las hojas de pegatinas y dejas de pegar las que vienen etiquetadas como recambios y pegas el resto, te van a faltar bloques, y si te das cuenta demasiado tarde te faltarán bloques para pegar todas las unidades.
Creo que para este sistema, ya que los bloques no aportan niebla de guerra, gana cuando la opción escogida para las unidades son miniaturas como en otros títulos de la serie.
Opinión
Es un juego fácil de explicar y rápido de jugar, es dinámico y apto para todos los públicos, cualquiera medianamente interesado en el tema o en los juegos de mesa disfrutará montando un escenario y jugando una de las batallas propuestas. Pero si te gusta la estrategia se queda un poco corto, aunque parezca que sí por la variedad de cartas, no hay demasiadas opciones, se trata de acercarte al enemigo y combatir esperando que tus unidades destruyan a las contrarias antes de que pase al revés, y para eso será importante tener suerte con los dados. Tus decisiones van a modelar el azar, pero no tanto como para que la estrategia sea el factor más decisivo, a veces parece que siempre estás haciendo lo mismo y puede ser repetitivo. Un jugador que busque profundidad puede que se sienta defraudado por este título. Está claro que las sucesivas expansiones que parece ser que también va a traducir Devir irán aportando más cosas.
Como siempre recomiendo probarlo, pero no le pidas más de lo que tiene, eso sí, si lo que pretendes es una batalla relativamente rápida y sin necesidad de quemar muchas neuronas, este puede ser tu juego.
Conclusión
No me canso de agradecer a Devir que ponga a disposición de los jugadores españoles este tipo de juegos en nuestro idioma. Command & Colors: Edad Antigua es un juego consolidado con una legión de seguidores en todo el mundo y muy divertido de jugar, aunque no sea mi sistema favorito y yo suela cansarme un poco si lo juego muy a menudo. Estamos ante un juego apto para todo el mundo y con componentes de gran calidad, no dudo que va a ser un éxito de ventas como ya lo ha sido la edición de GMT.
Valoración Subjetiva
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