Por el Rey y por mi es una reimplementación de Biblios un juego que ahora nos viene con nuevo arte y algunos ajustes gracias a TCG Factory.
Por el Rey y por mi, un favor por otro favor
Ficha
Por el Rey y por mi
- Diseño Steve Finn
- Ilustración Anthony Weinstock
- 2-5 jugadores
- 30 minutos
- +10 años
Introducción
Hay un nuevo Rey en la ciudad y, como buenos súbditos, vamos a ayudarle, más que nada porque si le ayudamos como Dios manda el bueno del Rey nos va a asignar cargos buenos con los que vamos a poder chupar del bote.
Esta es la premisa de Por el Rey y por mi en el que nos vamos a encontrar con un juego de mayorías que se juega en un abrir y cerrar de ojos, y que nos va a dar unos buenos ratos de diversión.
¿Cómo se juega?
Y como se juega a esto, vamos a hacer una breve descripción de las mecánicas, ya que son tan simples que también nos sirven para rellenar espacio en este artículo.
El juego se va a jugar en dos fases diferenciadas, y que ambas están marcadas por el final del mazo. En la primera fase porque se acabe el mazo en sí, y en la segunda fase porque se acabe el mazo que hemos creado en la primera.
La idea del juego es ir consiguiendo y asignando cartas para hacernos con las mayorías. Vamos a tener cartas en los colores de las diferentes mayorías, con valores diferentes, y cartas de dinero también con valores diferentes, aparte tenemos unas cartas que modifican valores, pero más sobre esto después.
Entonces, en una primera fase vamos a tener el mazo casi completo de cartas (se sacan unas fuera para que no haya información completa) y en cada turno de jugador se van a sacar tantas cartas como jugadores más uno haya.
Estas cartas se van a asignar a tres espacios diferentes:
- Una carta nos la vamos a quedar para nuestro mazo personal
- Una carta por jugador se va a quedar visible en la mesa para selección de los demás
- Una carta va a ir al mazo que se genera para la segunda fase
Y, por supuesto tenemos que decir, que las cartas se van sacando de una en una, es decir, robas una carta y decides a cual de los tres montones va, robas otra y haces lo propio, así hasta que hayas robado tantas cartas como jugadores más uno. Una vez que el jugador activo ha sacado las cartas, el resto de jugadores va a elegir una de las disponibles boca arriba en orden de turno. Y pasamos al siguiente jugador.
La segunda fase se va a jugar con el mazo que se ha ido generando en la primera fase, y consiste en una fase de subasta. Cada turno sale una carta de ese mazo y se va a subastar, la peculiaridad de la subasta es que las cartas que son de color o de modificación de valor se subastan con el dinero que hayamos ido consiguiendo en la primera fase, mientras que las cartas de dinero se subastan en número de cartas.
Y hacemos todo esto hasta que se acabe este segundo mazo, en ese momento vamos a comprobar quién tiene más apoyo para conseguir cada uno de los cargos, y el que más tenga se va a llevar el puesto (puntos) más alto y el segundo se va a llevar el segundo puesto.
Ya está, el que más puntos haya conseguido es el que gana.
Estética y componentes
El juego nos presenta una caja de tamaño muy adecuado y no muy grande con un tablerito donde vamos a ver las diferentes mayorías (o puestos del Rey) por las que vamos a luchar, unas cuantas fichas para ver el valor o puesto que vamos a conseguir al final y un buen mazo de cartas, todo ello de buena calidad.
Y con un inserto muy adecuado, ya que tiene un sitio marcado para cada cosa, incluyendo un plastiquito que se encaja para que no se muevan las fichas. Aun así, si la caja tiene un poco de ajetreo se va a desparramar todo, pero el inserto es bueno.
Apuntes de interés
Así que vamos a comentar algo más al respecto.
Primero tenemos que comentar sobre las cartas que no todos los colores tienen los mismos valores, por ejemplo las de color azul van de valor 2 a valor 4, mientras que las verdes, por ejemplo, solo tienen valor 1 y 2. Esto está bien, pero tampoco es que sea reseñable.
Segundo tenemos que mencionar el cómo se asignan las cartas en la primera fase, ya que el hecho de que tengas que decidir cada vez que saques una, sin saber el resto que vas a sacar le pone un punto muy divertido de riesgo al juego. Que hago con esta carta, me interesa ir a por esto o mejor lo saco para que se lo lleven los demás, no espera, ya se que carta es, así que la voy a dejar para el mazo de la segunda fase y a ver si me la puedo llevar en la subasta.
Tercero seria el tema de la subasta de la segunda fase, sabes parte de la información y puede que te hayas ido preparando, pero es que la subasta de dinero solo la puedes hacer con las cartas que te hayas llevado de dinero, y eso también implica que te has llevado menos cartas para la puntuación de las mayorías, además no hay cambio en la cantidad que pujes, es decir, si pujas 3 y tienes solo dos cartas de 2, vas a estar pagando 4. Por otro lado, las cartas de dinero se subastan con cartas, lo que puede ayudarte a farolear o librarte de cartas que no querías porque, o bien tienes suficientes de ese color, o piensas que no lo vas a ganar, como puede ser esa carta perdida verde con valor 1 que no te va a servir para nada, o si porque igual ganas una carta de 3 de dinero.
Y por último la puntuación, cada puesto tiene una puntuación para el primero y otra para el segundo (la mitad redondeando hacia abajo), esto empieza con valor de 3 y 1, pero, os acordáis de unas cartas que dije que iba a comentar después? Pues es el momento. Hay unas cartas que van a ir saliendo durante la partida que sirven para modificar estos valores, hay cartas que suben el valor de dos puestos, hay cartas que bajan dos, hay cartas que solo lo hacen con uno, otras suben y bajan… haciendo que, al final de la partida cada puesto tenga unos valores diferentes. Ese puesto a por el que has ido, resulta que ahora solo vale 1 punto para el primero, y aquel otro que no querías para nada vale 6 puntazos al primero y 3 al segundo, mas que tu ansiada mayoría.
Conclusiones
Pues esto es el juego de Por el Rey, y por mí. Un juego de reglas muy sencillas que se juega en menos de media hora. Es un juego muy divertido, aunque sí es cierto que puede costar entender el mecanismo al principio, pero enseguida los jugadores se hacen con él y entran en la dinámica de la diversión, y de poner caras con las cartas que van robando, y de hacer comentarios.
Además, como detalle muy guapo, cada uno de los puestos tiene un nombre diferente, es decir, el color rojo estamos hablando de un maestro constructor, pero el de valor 6 es el Arquitecto Real.
Lo que no se nos puede pasar comentar, y con esto vamos a terminar, es que este juego es una reimplementación del Biblios, aquel juego que venía en una caja imitando a un libro y que tenía unos dados que cambiaban de valor. Es la misma mecánica, los cambios que le han metido en esta reimplementación, y que me parecen muy acertados, son el cambio de tema (vale, que es un euro, pero el tema y detalle de los puestos mola más) y que ahora hay pelea por una segunda posición en cada uno de los puestos, mientras que en el Biblios solo ganaba el que mas tenia de cada color, aquí hay premio para el segundo, y le da más gracia.
Valoración Subjetiva
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