Julius Caesar juego de mesa

Julius Caesar, reseña by Toni

Julius Caesar es un wargame de bloques que utiliza el sistema ideado por Columbia Games, un juego que llevaba tiempo en el mercado y que no ha sido hasta ahora que la editorial Doit Games se ha aventurado a traerlo.

Julius Caesar, la Segunda Guerra Civil Romana

Julius caesar juego de mesa

Ficha

Julius Caesar

  • Editorial: Doit Games
  • Diseñadores: Justin Thompson y Grant Dalgliesh
  • Ilustraciones: Karim Chakroun y Mark Churms
  • 2 jugadores
  • 120 – 180 minutos

¿De qué va?

Tras el fin del Triunvirato el 10 de enero del 49 a. de C. Julio César cruza el Rubicon y empieza la segunda guerra civil romana que durará hasta el 45 a. de C. Por un lado Pompeyo con los poderes y las legiones del senado y por otro César con las tropas que trae de su campaña de las Galias van a luchar por el Imperio Romano. Los jugadores van a maniobrar sus legiones y tropas auxiliares representadas por bloques de madera para controlar las ciudades más importantes a lo largo de los cinco años de guerra.

¿Cómo se juega?

Julius Caesar se juega a lo largo de 5 años cada uno de ellos dividido en 5 turnos y una fase de invierno. Voy a explicar brevemente las reglas más importantes puesto que es un sistema sencillo y creo que se puede hacer con pocas palabras.

Este es un juego de bloques con el sistema ideado por Columbia Games y que ya ha demostrado su buen funcionamiento desde hace años con muchos títulos exitosos. Tal vez la característica más reconocible es la “niebla de guerra” que permiten los bloques puesto que sólo el propietario ve el lado donde está la pegatina con la información sobre la unidad y el contrario sólo sabe que hay unidades sin ver sus características.

Julius Caesar no es un “Card Driven” al uso pero sí funciona con un motor de cartas, los jugadores reciben cada turno una mano de 6 cartas y descartan una para quedarse con 5, una para cada turno del año. Hay dos tipos de carta: las de órdenes con iconos y números que regulan el movimiento y los reemplazos y las de evento con un texto que explica sus efectos. Los jugadores juegan con el mismo mazo y este se baraja todos los turnos lo que posibilita que algunos eventos salgan varias veces o no salgan en toda la partida.

La mecánica es la siguiente: los jugadores escogen una carta y la revelan simultáneamente, si los dos han elegido eventos, se cancelan y acaba el turno, si sólo uno ha elegido un evento, se resuelve y después el otro utiliza sus órdenes para mover sus unidades y añadir reemplazos, si los dos han elegido cartas de órdenes juega primero el que tenga la carta más alta o Julio César si hay empate. Después del movimiento de ambos jugadores si hay bloques en la misma ciudad se produce una batalla.

Sin entrar en muchos detalles para no hacerlo largo, en orden de iniciativa según la calidad de las diferentes tropas (Legiones, auxiliares, caballería, líderes) y empezando por los defensores en caso de empate, los jugadores lanzan un dado por cada punto de fuerza causando impactos según su factor de combate, cada impacto elimina un punto de fuerza de una unidad enemiga. Por ejemplo, una unidad con dos puntos de fuerza y con un factor de combate de B3 lanzará dos dados (después de las unidades con factor A y antes de las de factor C) y logrará un impacto por cada resultado de 3 o menos.

Si al final de cuatro rondas de combate el defensor no se ha retirado o ha sido destruido el atacante debe volver al lugar desde el que atacó, en caso contrario ocupa la ciudad atacada. Cuando los dos jugadores han acabado su mano, se juega una fase de invierno en la que se chequea si alguien ha alcanzado los puntos de victoria necesarios para ganar la partida, los barcos vuelven a puerto y se eliminan las unidades que las ciudades no puedan mantener si no has tenido cuidado al distribuirlas. Y así hasta jugar los 5 años si no hay una victoria antes de tiempo.

¿Cómo se gana? Las ciudades más importantes otorgan puntos de victoria al jugador que las controla (Roma y Alejandría dan 2 puntos y el resto 1) y eliminar un líder del bando contrario también da un punto. Si en una fase de invierno un jugador tiene 10 puntos gana la partida, si se llega al final del 45 a. d C. gana el jugador que tenga más puntos, en caso de empate gana el que controle Roma.

Julius caesar juego de mesa

Rejugabilidad y jugabilidad en solitario

Es muy rejugable como todos los juegos en los que hay tiradas de dados puesto que los combates no tendrán el mismo resultado de una partida a otra. Además los eventos salen de una forma aleatoria y distinta cada vez. Esto unido a la duración contenida para ser un wargame y lo dinámico que es su juego hará que vea mucha mesa. No lo veo jugable en solitario pues todo se basa en información oculta, pero he oído que hay gente que sí lo ha jugado.

Estética y componentes

Hay que tener en cuenta que este juego es una reimpresión, que no rediseño, de un juego de 2010. Los componentes son vistosos y de buena calidad. Los bloques de madera tienen buen tamaño, las pegatinas son buenas y las ilustraciones cumplen perfectamente su cometido mostrando muy bien la información necesaria sobre las unidades. Las cartas están bien aunque desde que los jugadores hemos decidido enfundarlas para protegerlas es un factor menos importante, yo las he visto de la calidad suficiente como para no hacerlo y jugarlas a pelo.

El tablero con el mapa que representa al Imperio Romano de la época tiene buen tamaño y los colores e iconos se han elegido bien, aunque aquí voy a criticar un aspecto del diseño. Los bloques son grandes y las ciudades y caminos son pequeños… no caben bien. Creo que si el diseñador hubiese optado por un mapa de zonas en lugar de punto a punto sería más cómodo de jugar, no es que suponga un problema puesto que basta con juntar los bloques que están en la misma ciudad y ya está, no hay hay densidad suficiente de bloques como para que haya confusión, pero quedaría mejor cada bloque en su zona.

El libro de reglas está bien redactado y bien traducido, la maquetación es correcta y tiene los ejemplos suficientes para explicar el sistema de juego. Le doy un aprobado en este apartado.

Lo mejor y lo peor

Pros

  • Con 31 bloques por bando y 27 cartas este juego consigue representar muy bien una guerra civil en el Imperio Romano, y esto es lo mejor.
  • De una manera sencilla y en tres horas muy divertidas vamos a jugar una partida trepidante que nos dará momentos épicos para recordar.

Contras

  • Lo peor podría ser que por la misma sencillez del sistema se pueden dar situaciones en las que la suerte sea decisiva, sólo hay 7 cartas de eventos, algunas muy potentes, y se pueden empeñar en salir todas favoreciendo el mismo lado.
  • También veo el juego algo descompensado a favor de Pompeyo, sobre todo para jugadores novatos aunque parece ser que con partidas y con experiencia se compensa.

¿Qué me ha parecido?

Me ha parecido un juego muy divertido que cumple lo que promete, no va a defraudar a los que sepan lo que compran. No soy ningún fan de los juegos de bloques aunque tengo algunos, siempre prefiero una fichita de cartón con sus simbolitos y factores, pero he de decir que este me ha sorprendido gratamente, aunque no debería porque no es una novedad.

Conclusiones

Este juego lleva desde 2010 jugándose, está el 45 en la lista de wargames de BGG, y eso es por algo. Hay que agradecer a Do it Games que nos traiga este clásico en español lo que hará que muchos jugadores que no lo conocían se puedan acercar a él. Es el segundo que traen con este sistema después de Hammer of the Scots y no creo que sea el último. Adelante y probadlo que no os arrepentiréis.

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