Bellotacon juegos de mesa

Mi paso por la BellotaCon 8

Este pasado fin de semana se ha celebrado, como todos los años desde 2018, la BellotaCon 8.

Ocho ediciones ya de la convención decana de wargames en España desde que ya no se celebran las Antebellum en Almería. No es la primera vez que escribo un artículo tras asistir a las Bellota y no quiero repetirme, otros años ya os he contado lo fantásticas que son, el gran ambiente que allí se crea y lo bien que nos lo pasamos, así que este año me voy a limitar a contaros mi paso por los salones, mis partidas.

Bellotacon 8 ¡Ocho maravillas!

El jueves por la mañana, después de acreditarme, me acerqué a las mesas en las que los autores de New Cold War (Andoni Orive e Igor Plaza) estaban mostrando su juego. Este juego ya lleva siendo enseñado un tiempo y ha circulado por varias convenciones, siempre con buenas críticas, y no lo había probado así que este año me apunté para jugarlo.

En mi mesa se sentó Andoni como un jugador más y a mi me correspondió ser Rusia, el juego cubre el periodo de 1989 a 2019 en el que 4 jugadores van a manejar a Rusia, China, Estados Unidos y la Unión Europea para intentar ser la potencia dominante del siglo XXI.

Una breve explicación fue suficiente para poder jugar la partida y tengo que decir que el juego me gustó mucho, si bien es fácil compararlo con Twilight Struggle por el tema y porque funciona con un motor de cartas, es muy distinto y jugable de uno a 4 jugadores y no sólo a dos (Andoni nos explicó que si hay menos de 4 jugadores hay bots que manejan las potencias que no juegan), no es una reseña y no os voy a explicar el juego aquí, pero es muy tenso, muy dinámico y muy bueno. Lógicamente la partida terminó con victoria automática de Andoni con la Unión Europea ya que era el único que conocía el juego y lo conocía muy bien, claro.

VUCA Simulations lo va a publicar y en unos meses llegará a las tiendas, no os lo perdáis.

Por la tarde una partida a una de las series de las que me más se habla últimamente en los foros wargameros españoles: Great Campaigns of American Civil War o GCACW como se conoce. Jugamos en modo multijugador 3 contra 3 un escenario del juego Thunder on the Mississippi, Yankee Blitzkrieg. Y

o estaba bastante confiado porque el gran gurú de esta serie en España, Alberto Romero, era el comandante de mi bando, el Norte, pero no sirvió de mucho. Entre alguna decisión cuestionable y una mala racha de resultados en los dados no pudimos alcanzar nuestros objetivos y la Confederación se llevó la victoria.

Por la noche ya el cuerpo no podía con más partidas pero sí para escuchar así que convencí a Gonzalo de HQ Wargames para que me enseñara y explicara el Battle Commander: Volume 1, un juego táctico (más o menos, más bien gran táctico) napoleónico que ha salido por Gamefound y ellos se encargan de la versión en español.

Es un juego algo abstracto pero con muy buenas ideas, me gustó e ilusionó lo que ví, estoy deseando que me llegue para probarlo.

El viernes llegaba el plato fuerte del fin de semana, la gran partida que estaba esperando desde hacía tiempo: La Batalla de Austerlitz con Austerliz 1805, Rising Eagles. Lo jugamos también por equipos (3 contra 3) repartiéndonos los cuerpos involucrados en la batalla.

Yo participé en el bando francés asumiendo el mando del cuerpo de Davout y soportando los primeros ataques de la coalición. Estuvimos todo el día disfrutando de un gran juego, una gran partida y muy buena compañía, no es lo más importante pero esta vez tampoco estuve del lado vencedor, la historia cambió y fue la Coalición la que hizo morder el polvo a las tropas de Napoleón.

Como veis no he ganado mucho, disfruto tanto perdiendo que cuando gane va a ser la bomba.

Por la noche me perdí una partida a Blood on the Clocktower organizada por el gran Asier Rojo con un montaje muy aparatoso en medio del hall de la sala de juegos, pero nuestra pelea por los altos de Pratzen se alargó más de lo previsto como suele pasar.

Después del esfuerzo del día anterior el sábado se presentaba más relajado, últimamente a todas las jornadas a las que voy me apunto a una carrera de cuádrigas y las de BellotaCon 8 tocaba ahora.

Una partida a 7 jugadores al Circus Minimus, una actualización y simplificación del Circus Maximus hecha en el año 2000 por el recientemente fallecido Dean Essig. Sergio Alama (también cabeza visible de la organización de estas jornadas) nos enseñó este juego del que había hecho una versión deluxe imprimiendo en lona un tablero XXL y usando bloques de madera para los carros.

Unas ideas muy interesantes que le quitan “paja” al juego original y se centran en lo importante y divertido. Ese día me desperté con el dios de los dados de mi parte y mi carro fue inexpugnable, hasta tres áurigas intentaron derribarme con sus látigos y terminaron descabalgados y corriendo por la pista tras sus monturas.

Ni que decir tiene que está partida sí la gané aunque casi necesitamos la foto finish con el carro de Ander a sólo una casilla del mío.

La tarde del sábado me trajo una de las grandes alegrías que me he llevado estos días, volver a sentarme con Fernando Sola, esta vez con su flamante Panzer North Africa. Fernando acudió a las jornadas con su hijo Daniel que es finalmente contra el que jugué un escenario en el que los alemanes debían desbordar las posiciones de los ingleses.

No suelo ser muy bueno desplegando mis tropas cuando me enfrento a un escenario por primera vez y esta partida no fue diferente, Daniel no tuvo demasiadas dificultades en atravesar mis líneas y destruir algún carro de paso.

Tuve que rendirme cuando ya no era posible detener la cascada de puntos de victoria que estaba cayendo del lado alemán.

Y por la noche, aunque empezamos algo más tarde de lo previsto, unos turnos a Technobowl con Alberto Romero, un juego muy divertido simulando un partido de fútbol americano.

Aquí los dados también estuvieron todo el rato conmigo y aunque sólo jugamos unos downs pude hasta marcar un Touchdown.

El domingo es día de despedidas y también suelo aprovechar para detenerme un poco en los stands de las editoriales. Me explicaron el Castelnuovo 1539, un juego de Paco Ronco (te hemos echado de menos en esta edición, y aunque te hayas ido un poco lejos recuerda que hay aviones 😉 ) que va a editar Draco Ideas. Me llevé una agradable sorpresa, una vuelta más al sistema de bloques del Santa Cruz y por lo poco que vi, superior al anterior Von Manstein’s Triumph, Me quedaron muchas ganas de jugar la partida completa, a ver si llega pronto a nuestras mesas.

También pedí a Piru que me explicara brevemente el Esparta del que tenía muy pocas referencias pero había oído que usaba el sistema del Twilight Struggle, me confirmó que así era y me dio algún detalle del funcionamiento con mecánicas también tomadas de algún otro juego, lo pongo en la lista de los pendientes de jugar.

Y hasta aquí lo que dio de si esta convención, y no he comentado la degustación de jamón de Señorío de Montanera y de cerveza artesanal Ballut, las raciones de bacalao dorado que siempre acompañan mis visitas a Badajoz, la amabilidad de las chicas de la cafetería del hotel… pero no hace falta para decir que han sido 4 días estupendos en un ambiente magnífico. Gracias Sergio y compañía y hasta el año que viene.