quinacon juegos de mesa

Mis partidas en la Quinacon

Este fin de semana estuve en la Quinacon, y sí, fui por segunda vez. ¡Qué alegría saber que Edko de AqueSejuega organiza este evento anual! Es como el día de “vamos a jugar a Ameritrash hasta que se acabe el mundo”. Este festival de locura se lleva a cabo en un hotel de Barcelona, donde la gente va a jugar como si no hubiera un puto mañana y a conocer a otros enfermos de los juegos como tú.

La dinámica es simple: traes tus juegos, si ves un hueco, ¡te lanzas a jugar! Este año, como novedad, el evento se extendió a dos días completos, así que tuvimos más tiempo para empaparnos de enfermedad y vicio a saco.

El año pasado fui con Marta, y aunque jugué un montón de joyitas, la eché mucho de menos. Pero este año la compañía fue TOP. Estuve compartiendo mesa con la persona más guay del mundo, Benja, con Marina, que cuando se pone a jugar, no hay quien la pare, vaya ostias que pego. Y Litus, que trajo sus minis pintadas, preciosas y detalladas, hizo que la experiencia fuera de 10.

Durante la semana previa, estuvimos dándole vueltas a qué mandanga llevar. Yo hice una lista de juegos que normalmente no toco porque implican más horas que una maratón de series, y a veces leer las reglas es un puto trabajo. Así que decidí que era hora de desempolvar esos juegos olvidados o que necesitan más horas.

Empezamos a primera hora con…

Nemesis: Lockdown

«Nemesis: Lockdown» es una experiencia intensa de juego cooperativo que lleva a los jugadores a un secreto base en Marte, donde deben sobrevivir a las amenazas alienígenas mientras completan sus propios objetivos ocultos. La jugabilidad se centra en la exploración y la recolección de objetos, combinando elementos de horror y ciencia ficción. Cada partida es un ejercicio de tensión, donde la traición puede surgir en cualquier momento, lo que mantiene a todos al borde de sus asientos

Y tengo que decir que fue brutaaaaaaaaaaaaal. Yo hice de chunga y estuve puteando al resto, ¡me gané el odio de la mesa! La verdad es que jugué al borde del divorcio, pero fue increíble. En esta partida también contamos con Edko que fue a su bola robando cadáveres al resto.

Este juego es temático a morir, y la tensión es palpable en cada jugada. Si sois fanáticos de Alien, esta segunda parte es brutal: en vez de estar en la nave, estás en Marte, intentando sobrevivir usando las cápsulas y bunkers, y hay nuevas mecánicas, como la energía, que son un puntazo.


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Legendary Encounters: The Matrix

Es un juego de cartas cooperativo donde los jugadores se convierten en héroes icónicos como Neo, Morpheus y Trinity, enfrentándose a enemigos como el Agente Smith y otros villanos de la franquicia. El objetivo es salvar a la humanidad de la amenaza del sistema. El juego ofrece una experiencia inmersiva y está diseñado para capturar la esencia de la trilogía.

Lo jugamos en su peor número: cuatro personas, y después de dos partidas, no conseguimos ganar ni de coña. Al día siguiente lo jugué a dos y, ¡sorpresa! Lo pasamos con un montón de margen. El problema, por llamarlo así, es que los Legendary no están bien calibrados para el número de jugadores, pero las escenas temáticas que suceden son tan impresionantes que, para mí, es de los mejores deck-buildings que he probado.


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Cthulhu: Death May Die

“Cthulhu: Death May Die» es un juego cooperativo que enfrenta a los jugadores contra las fuerzas de los Mitos de Cthulhu. En él, los jugadores deben manejar su cordura mientras luchan contra monstruos y tratan de evitar que un gran antiguo despierte. Este juego destaca por su combinación de horror, estrategia y una mecánica que permite a los jugadores volverse más poderosos a medida que se arriesgan, haciendo que la experiencia de juego sea increíblemente intensa y divertida. Es un homenaje perfecto a los fans del horror cósmico

No os voy a mentir, le tenía unas ganas que no os podéis imaginar. Hacía tiempo que no disfrutaba tanto de un puto juego. ¡ME PARECE BRUTAAAAAAAAAAAAL! La premisa es derrotar a una bestia divina de la polla, porque su figura es tremenda, y sabes que vas a acabar hecho un puto majareta. La locura de volverte loco y cómo eso te vuelve más poderoso me flipó muchísimo. Ver a mis compis jugar fue super épico; todos nos íbamos muriendo por salvar a la humanidad, pero la risa no faltó.

Así que, en resumen, fue un gran día lleno de juegazos.

 ¡Nos vemos el año que viene en la QuinaCon!