Rol

Jugar a Rol no consiste en imaginar

Nuestro compañero Funs Athal nos trae un nuevo artículo de opinión en el que nos da su visión sobre la creación de partidas de Rol.

Creando una partida de Rol

El receptáculo del Terror Rol

«Un juego de rol es un juego de imaginación. Es un juego en el que los jugadores crean historias juntos. El juego se desarrolla principalmente en la mente de los participantes con la ayuda de hojas de personaje y fichas, dados y reglas (como las de este libro) para el arbitraje y la interpretación.»

Manual básico The Troubleshooters

El párrafo anterior pertenece al manual básico de The Troubleshooters. Es un texto que no sorprende a nadie por contener conceptos comunes en las definiciones que muchos manuales básicos utilizan para describir qué es un juego de rol. Sin embargo, a mí me ha llamado la atención una cosa. «Un juego de rol es un juego de imaginación.»

Pero… ¿Y si os dijera que jugar a Rol no consiste en imaginar?

La llamada de Cthulhu Rol

Jugar a rol es una práctica realizada entre una o varias personas en la que crean una ficción a través de un dialogo. Ese dialogo presenta una serie de situaciones en las que quien interpreta a los personajes debe decidir cómo resuelve los desafíos de cada escena, no imaginarlos.

Imaginar es la capacidad de crear imágenes mentales, pero jugar a rol no consiste de eso.

No quiero decir que la gran mayoría de las personas creen imágenes mentales de lo que sucede en las sesiones de juego y durante la creación de las aventuras, pero el acto de jugar a rol no consiste en imaginar. Pues en ese caso, muchísimos actos que realizamos en nuestra vida consisten en imaginar.

La imaginación es pues una consecuencia del juego y no aquello en lo que consiste.

Lejos de las definiciones frecuentes con las que tratamos de determinar que es un juego de rol, cada vez estoy más convencido que el concepto de rol se reduce en: tomar elecciones tomando como criterio lo que personajes ficticios (nuestros PJ) realizarían en situaciones ficticias.

No sé si esto es mucho texto o lo ficticio se repite mucho.

Si claro, para representar esas decisiones interpretamos que harían en la situación planteada nuestros personajes, eso también, pero en realidad esa interpretación es el medio en el que comunicamos la decisión que hemos tomado. El fin no es la interpretación en sí, y menos ejecutarla tal y como podemos verlo en el cine o el teatro. Hay quien interpreta, pero eso no hace que sea rol. Y a decir verdad, por si sólo tampoco el tomar decisiones hace que sea rol. Es un conjunto de cosas en las que siento que esa toma de decisiones es el factor clave.

La toma de decisiones es:

  • La raíz a partir de la cual nos indica cómo interpretar a nuestro personaje. Utilizamos el diálogo para expresar esas decisiones, puede que de manera grandilocuente o mediante la interpretación de nuestro personaje.
  • El detonante que nos indica qué mecánicas del sistema se emplean en un contexto determinado. Usamos las reglas para saber si las decisiones tomadas hacen que nuestros personajes superen los desafíos.
  • Aquello que nos indica hacia dónde y de qué manera avanzará la historia. Las escenas avanzan o se resuelven de manera diferente según las decisiones y acciones que hemos concluido que realizaran nuestros personajes.
D&D Rol

Todo ello sin necesidad de crear una imagen mental. Si necesidad de imaginar.

¿Por qué afirmo esto? Mi capacidad de crear imágenes mentales es escasa. Es decir, padezco cierto grado de afantasía.

No es una falta absoluta de la capacidad de imaginar, pero sí bastante escasa.

Descubrí que mi carencia en esta capacidad cuando, hace bastante tiempo, el autor Sirio Sesenra dijo que su excesiva capacidad de imaginar le había creado problemas. Todo lo contrario que me sucede a mí.

Hasta ese momento nunca me había planteado relacionar la capacidad de crear imágenes mentales con el rol. Como yo no utilizo esa herramienta, no suponía que muchas otras personas podían utilizarlo para jugar a rol.

Y sin embargo, con o sin imaginar llevo jugando a rol un tiempo nada despreciable. Es decir, jugar a rol no consiste en imaginar ya que si no, yo no sería capaz de jugar.

Que jugar a rol consista o no en imaginar no va a cambiar nada de cómo sentimos o definimos los juegos de rol. De hecho, a pesar de que la definición de imaginar no coincida con el uso que la gente de a pie utilizamos para esa palabra, más cercana a las descripciones que empleamos para definir que es un juego de rol, no evitará que la utilicemos, incluso yo mismo, para hablar sobre que es jugar a rol. Y siempre podríamos justificar su uso con su tercera acepción: inventar o crear algo, aunque yo lo siento más cercano a la fase de preparación de aventuras que al acto de jugar a rol.

Y por supuesto, no será lo que evite que sigamos jugando a rol, creemos aventuras, interpretemos personajes y disfrutemos de un agradable rato de ocio con nuestres amigues.

¡Que veiga bueno!