Aventuras de Rol para gente adulta. No sabéis la cantidad de veces que he reflexionado sobre este asunto. Y todavía sigo haciéndome preguntas ante una cuestión que no tiene una única respuesta y menos respuestas fáciles.
Aventuras de Rol para adultos ¿Cuál es la diferencia?
¿Qué son?
¿Qué elementos las componen?
¿Por qué son «para gente adulta»?
En ocasiones he leído o escuchado decir a algunes autores de juegos de rol que tal cual aventura o juego estaba orientado para gente adulta, o que el público potencial de su juego era adulto.
En la mayoría de las ocasiones estas aventuras incluían escenas de sexo o alguna acción de abuso contra personajes femeninos. ¿Esto significa que si se incluye una escena así la aventura no está recomendada para menores de edad?
¿Es el único factor a tener en cuenta?
Es evidente que no, pero sorprendentemente (o no) es cuando aparecen estas escenas o acciones cuando una aventura se suele etiquetar de «para gente adulta». Personalmente me niego a reducirlo a eso.
El otro día comencé a revisionar Full Metal Alchemist, uno de los mejores Animes/ Manga que he podido disfrutar. Una historia denominada Shonen por sus componentes de aventura, amistad, protagonista especial que es el centro de todo, y trama con tintes épicos. En principio nada que puede denominarse bajo la etiqueta «para gente adulta» ¿no? Sin embargo, el Anime está recomendado para 16 o más años.
Si, si, igual os importa un pimiento que veo yo en la tele en mi tiempo libre, pero os prometo que esta serie está relacionada con el artículo de hoy. Y mucho.
Full Metal Alchemist tiene violencia, pero no más que otros animes o series con recomendaciones de edad menores.
- También tiene su dosis de sangre, pero nada en particular gore.
- No tiene escenas de sexo.
- No entra dentro del género de terror.
- No abundan los personajes femeninos con características que busquen atraer al varón hetero cis medio.
Si no tiene nada de eso ¿Qué elementos posee esta serie para que su edad de visualización aconsejada sea 16 años? Aventuras, el poder de la amistad, un protagonista especial, un malo muy maloso al que derrotar… no parece nada excesivamente duro.
Algunos de los motivos por los que esta serie está recomendada para gente de 16 o más años es por su compleja trama oscura cuya base se sustenta en la corrupción política, corrupción militar, maltrato infantil, xenofobia, la dolorosa muerte de algunos protagonistas al estilo Canción de Hielo y Fuego… creedme, lo que les ocurre a algunos personajes duele más que una Boda Roja.
Pero hay una cosa que creo que hace que todo lo anterior cobre sentido. La corrupción, el maltrato infantil, los actos salvajes o despiadados siempre tienen un motivo racional. Están hechos por aquellos que menos te lo esperas y dan sentido a la trama. Están ahí como motor de emociones y no solo para satisfacer el morbo.
¿A qué me recordará eso del motor de emociones? A si, Pendragon… un juego con más de 30 años cuyo motor principal para hacer avanzar la trama son las pasiones y los rasgos de personalidad. Y aquí entramos en temas todavía más oscuros que los anteriores. La desesperación, la ambición, y otras pasiones poseídas por personajes son lo más oscuro y adulto que tiene esa historia.
Es decir, aquello que hace de esta historia algo recomendado a cuasi adultos no es el sexo, su abuso o el exceso de mujeres voluptuosas y con poca ropa, sino las debilidades, la desesperación, la codicia y la mente humana. Pues aunque hay monstruos en esta historia, en ocasiones los monstruos son humanos.
Volvamos nuestra mirada de nuevo a los juegos de rol, o tal vez por primera vez en este artículo, y preguntémonos ¿Qué es una aventura orientada para gente adulta?
Creo que no puedo dar una respuesta completa a esa respuesta, sin embargo, sí que creo que analizado aquello que podemos encontrar en Full Metal Alchemist y otras historias, como Canción de Hielo y Fuego.
Estas historias comparten muchos elementos como su complejidad, el dolor, la muestra de traumas, actos desesperados, traiciones, demostraciones de depravación, señales de degeneración mental y física, escenas en las que se tratan los sentimientos negativos… si, también hay mucha violencia, y en muchas de estas historias también hay sexo, pero que una aventura esté dirigida para gente adulta no tiene por qué incluir ninguna de estos dos elementos, o al menos en grandes dosis.
En esta clase de aventuras se debe de tratar de dar a elegir a quienes interpretan los personajes y ponerlos en un dilema. Que tengan dudas de sus acciones y elecciones y que vean sus consecuencias. Que descubran atrocidades y horrores que podrían haber evitado o con los que deben de lidiar para conseguir sus propios objetivos.
No es tan sólo «elegir el mal menor» al estilo The Witcher. Es ir un paso más allá y que cada decisión y cada personaje pueda ser utilizado para despertar emociones. Ese vagabundo que usaban de confidente y con el que casi tenían una amistad podría ser asesinado brutalmente por algo que hicieron sus PJ o tal vez ser un espía de sus enemigos.
Podría descubrir que esa sacerdotisa que cuidaba de los huérfanos es en realidad una saga devora niños o que ha sido secuestrada dejando a los niños sin atención. Quizás su contacto en la policía, quien les ha encargado varios casos, les ha usado para tapar su corrupción o ha sido asesinado por ayudarlos, dejando a su madre inválida sin nadie que la atienda.
¿Cómo se enfrentan los personajes a situaciones así? ¿Cómo actúan cuando han descubierto que sus aliados no son de fiar y sus enemigos atacan a sus seres queridos? ¿Qué hacen cuando descubren que las pistas de la aventura alcanzan cotas de poder que escapan a sus manos pero necesitan conseguir sus objetivos? ¿Quién se atreve a hacer jaque al rey cuando eres un peón?
Esta serie de ejemplos, para mí, es lo que hace que las aventuras estén dirigidas a gente adulta y no únicamente el sexo, el gore o la violencia.
Una aventura puede estar localizada en un lugar lleno de colorinchis, tener un estilo manga como en Ryuutama o Última fábula, y estar diseñada para personas adultas. Pues la complejidad presentada, las elecciones y las emociones que despierte la aventura al ser jugada, será lo que lo indique.
Lugares grises y oscuros únicamente son un escenario para presentar escenas. Una aventura más allá de la Muralla del Carpintero, en la Leyenda de los Cinco Anillos, puede consistir simplemente en ir a un castillo y matar a algunos monstruos para recuperar una reliquia familiar, algo que aparte del fondo tétrico y peligroso, no indica mucho más allá que la trama aventurera.
Sin embargo, una aventura en la más hermosa de las cortes, en las que todo está lleno de colores y la gente sonríe, puede esconder traiciones, actos abyectos, corrupción y una trama difícil de seguir por la cantidad de datos e información que reconocer.
Relacionado con esto, hay una serie de factores que esta afición arrastra desde sus inicios, cuando se publicó el primer juego hace ya 50 años (este año). Este suele ser el exceso de violencia que en muchas ocasiones relacionamos con algo dirigido a los adultos.
Empero, las aventuras con exceso de violencia suelen ser frecuentes ¿Por qué? Porque las escenas de violencia tienen acción que suele ser algo muy disfrutable en juego, es donde se consigue experiencia (y tesoros) en muchos sistemas y es fácil de incluir en las aventuras. Es el desafío base ¡Pon un combate! ¡Saca ninjas (u orcos)! Y que los empujen a la aventura. Incluir desafíos y tramas que no se asienten en la violencia es más complejo.
Presentar desafíos sociales, intelectuales, de habilidad, tácticos y de otros tipos es más difícil que un combate. Conseguir hacer que quien juega la aventura obtenga una experiencia heroica sin un combate requiere de un público que entienda que hay cosas más allá del saja raja.
Una aventura que hace esto muy bien es El Arca de los Mil Inviernos, una de las mejores campañas que he disfrutado jamás.
De este modo, el exceso de violencia no creo per se que indique que esté diseñado para adultos, puede ser más una hábito arrastrado de sus primeros años o quizás una señal de mediocridad por no saber (o querer) usar otras alternativas.
Por supuesto esto es únicamente mi opinión, la cual no tiene por qué ser compartida.
Y hasta aquí mi artículo de hoy.